ritual para lograr que te llame

Este ritual está indicado para aquellas personas que esperan una llamada de alguien y están deseosas de que esta se produzca.

En muchas ocasiones las llamadas se producen a su tiempo, no en el tiempo que nosotros queremos. En otras, incluso ni se producen y si ello no sucede es porque no está para nosotros esa persona aunque el amor y enamoramiento nos hagan pensar otra cosa.

Este ritual sirve para acercar la energía de la otra persona hacia vosotros, pero no obsesionar y no pensar que es hacer el ritual y que enseguida os va a llamar vuestro enamorado.

Para este ritual necesitamos un espejo, a ser posible con mango, una vela roja y canela en polvo.

Son objetos sencillos y fáciles de encontrar. Con ello nos sentaremos en un lugar tranquilo.

Primero agradeceremos a Dios el poder estar ahí y le pediremos que nos ayude.

Cogeremos la vela roja y la tendremos en nuestras manos pensando en la persona amada durante un rato. La acariciaremos con dulzura unas cuentas veces y procederemos a encenderla.

Mientras la encendemos diremos el nombre de la otra persona varias veces y la dejaremos encendida.

A continuación cogeremos el espejo y lo pondremos frente a nuestra cara y repetiremos nuestro nombre y el de la otra persona.

Mientras la vela se ira consumiendo. No hace falta que estemos todo el tiempo que tarda en consumirse la vela con el espejo en la mano y reflejándonos en el. No es necesario llegar a ser tan obsesivas.

Incluso podemos apagar la vela e ir encendiéndola conforme nos pongamos a realizar el ritual.

Recuerda luego no dejarla a la vista de nadie y tenerla en un lugar reservado, al igual que espejo.

Repetiremos este ritual para que te llame las veces que creáis oportunas y también os aconsejaría un tiempo de meditación y reflexión.

Quizás os deis cuenta que la otra persona no merece la pena o bien que podrías ser vosotras quienes lo llaméis y descubráis si en verdad está enamorado de vosotras.

Los rituales sirven para acelerar los procesos, no hacen milagros pero ayudan, y también sirven para esclarecer vuestras mentes y corazones y daros cuenta de lo que realmente merece la pena en la vida.

Sufrir por amor es algo por lo que la mayoría de las personas han pasado o pasaran, es como un aprendizaje de vida.